La singularidad tecnológica y la inteligencia artificial.

Google para su motor de búsqueda, Facebook para la publicidad dirigida, Apple para potenciar sus asistentes digitales o el sistemas compás en Estados Unidos, para predecirquién es más probable que vuelva a delinquir son ejemplos de uso de inteligencia artificial.

La singularidad tecnológica es el advenimiento hipotético de inteligencia artificial general, también conocida como IA fuerte.

Será aquel momento de la historia de la humanidad en el que el desarrollo tecnológico llegará a un punto en que las máquinas igualarán y superarán la inteligencia humana.

Si llegara ese momento, las máquinas crearían otras maquinas aún más inteligentes que ellas mismas, produciendo una escalada exponencial de la inteligencia artificial.

Así las máquinas se mejorarán a sí mismas de modo que cada nueva generación, al ser más inteligente, sería capaz de mejorar su propia inteligencia, dando lugar a otra nueva generación aún más inteligente, y así sucesivamente.

Un ejemplo típico de inteligencia artificial que aprende por sí misma es Alfa Go, un programa de inteligencia artificial desarrollado por deepmind de Google, que aprendió a jugar siguiendo no solo las reglas dadas por los programadores, sino -y esto es lo más relevante- empleando también un sistema de aprendizaje automático consistente en jugar contra sí mismo.

En este video se explica de forma muy clara todo el proceso:

Otra visión de la singularidad tecnológica pero de carácter distópico, son las palabras del ordenador Hall en la película de ciencia ficción de Stanley Kubrick, 2001 una odisea en el espacio.

En la escena que podéis ver en el enlace de you tube, Hal en respuesta a una orden humana donde le pide que abra las puertas del hangar, la máquina inteligente responde al humano: “ … lo siento David me temo que no puedo hacer eso …”: