El caso Amazon, Greg Linden, el poder de los experimentos de los trabajadores, el instinto y los datos.

Greg Linden fue uno de los primeros ingenieros de Amazon, prototipo del trabajador innovador al que le ocurre una idea que acaba triunfando, pese a que los responsables de marketing de Amazon le prohibieron trabajar en ella.

La idea era implementar una herramienta de recomendaciones a los clientes de Amazon en el momento de finalizar la compra, basada en aquellos productos que constaban en el carrito.

Cuando Linden presentó la innovación a sus jefes, los llamados HIPPO (Highest Paid Person’s Opinion), un vicepresidente de marketing desestimó la propuesta bajo el argumento que no era nada recomendable distraer al comprador durante el proceso de compra (según decía su experiencia).

Pese a ello -sostenella y no enmendalla debió pensar el trabajador- Linden preparó un prototipo y lo presentó en el sitio de pruebas interno de Amazon, siendo el resultado totalmente positivo, ya que no solo no interrumpía el proceso de compra sino que se incrementaron las ventas notablemente (el poder de los datos).

La conclusión es clara: los datos habían triunfado, dejando en mal lugar la experiencia e intuición del vicepresidente de marketing de Amazon.

El resto de la historia es conocida, con la implementación de un algoritmo de recomendación en Amazon basado en el experimento de Linden y posteriormente, su extensión a la mayoría de portales de venta online.

Este es un ejemplo paradigmático de la experimentación de los trabajadores en las empresas y un debate entre la prevalencia del instinto de los hippos o la experimentación con datos de los trabajadores.

Por cierto, en nuestra organización ¿cómo hubiera terminado la idea de Linden?.